EULAR, la alianza europea que representa tanto a personas con enfermedades reumáticas como a profesionales de la salud acaba de publicar una serie de recomendaciones para el manejo de la fatiga o cansancio excesivo en personas con enfermedades reumáticas inflamatorias:
Principios generales
- Los profesionales de la salud deben ser conscientes de que la fatiga o cansancio excesivo abarca múltiples factores biológicos, psicológicos y sociales que interactúan entre sí.
- Se debe preguntar sobre la fatiga de manera habitual a personas con enfermedades reumáticas inflamatorias y se deben ofrecer opciones de tratamiento como parte de la atención clínica habitual.
- Las decisiones sobre el manejo de la fatiga deben ser compartidas y acordadas entre el paciente y los profesionales que cuidan su salud y bienestar.
- Para controlar la fatiga, se deben considerar las necesidades y preferencias de los pacientes a la vez que la actividad de su enfermedad clínica, las comorbilidades y otros factores psicosociales y sociales individuales.
Recomendaciones
- Los profesionales de la salud deben incorporar evaluaciones periódicas de la gravedad, el impacto y las estrategias de afrontamiento de la fatiga en las consultas médicas.
- Como parte de sus cuidados, a las personas con enfermedades reumáticas inflamatorias y fatiga se les debe ofrecer acceso a intervenciones de actividad física personalizadas y alentarlas a realizar actividad física a largo plazo.
- Como parte de sus cuidados, a las personas con enfermedades reumáticas inflamatorias y fatiga se les debe ofrecer acceso a intervenciones psicoeducativas estructuradas y personalizadas.
- La presencia o empeoramiento de la fatiga debe desencadenar la evaluación del estado de actividad de la enfermedad inflamatoria y la consideración del inicio o cambio del tratamiento inmunomodulador, si está clínicamente indicado.
Parece poca cosa, pero este pequeño número de principios y recomendaciones sitúan a las necesidades del paciente como el objetivo fundamental de la atención sanitaria y a la fatiga como un síntoma más de la enfermedad reumática inflamatoria que puede/debe ser considerada como una manifestación inflamatoria más.
Para los muy interesados que se atrevan con el inglés, este es el enlace con el artículo.